Fuerte Baltit

Los paisajes del norte de Pakistán me recuerdan mucho a los de la película “El hombre que pudo reinar”, y si hay un lugar en el que pienso que pudieron suceder las aventuras que se cuentan en la película, sin duda, es la fortaleza Baltit en Karimabad, dentro del valle de Hunza, ciudad de paso de la célebre KKH (Karakorum Highway) que une China y Pakistán.

Este fuerte fue el hogar de los gobernantes hereditarios del Estado de Hunza, que llevaban el título de Mir, desde hace más de 500 años (cuando se mudaron de la antigua fortaleza de Altit) hasta el año 1945, cuando el Mir de Hunza abandono la fortaleza y se mudó a un nuevo palacio.

Parece ser que en el pasado, en la zona norte de Pakistán, había varios pequeños estados independientes. Entre ellos estaban los reinos de Hunza y Nager o Nagar, que tradicionalmente eran estados rivales. Situados a ambos lados del río Hunza, los gobernantes de estos dos estados construyeron varias fortalezas para consolidar su poder y defenderse de los ataques de los ejércitos enemigos.

Durante estos siglos, la supervivencia del régimen feudal de Hunza fue asegurada por esta impresionante fortaleza, estratégicamente situada. Los cimientos de la fortaleza se remontan a hace unos 700 años, con reconstrucciones y alteraciones a través de los siglos. En el siglo XVI, el príncipe local se casó con una princesa de Baltistán, que trajo artesanos Balti para renovar el edificio como parte de su dote. El estilo arquitectónico tiene una clara influencia tibetana budista proveniente de Baltistán.

Con el abandono de la fortaleza en 1945, esta comenzó a deteriorarse, lo que causó la preocupación de que podría caer en la ruina. A raíz de una colecta realizada por la Royal Geographical Society de Londres, se inició un programa de restauración con el apoyo de la Fundación Aga Khan. El programa se completó en 1996 y la fortaleza es ahora un museo gestionado por la Baltit Heritage Trust.

Recomendaciones:

• Es muy interesante visitar el interior de la fortaleza, pues ayuda a hacerse una idea de cómo era la vida en Baltit en el pasado (recomiendo contratar un guía).
• A primera hora de la mañana, con la fortaleza iluminada por el sol, hay una vista preciosa si subes en dirección al glaciar de Ultar, con los picos Diran Peak (7.266 m) y Rakaposhi (7.788 m) de fondo.
• Otra vista muy bonita de la fortaleza es desde las terrazas del hotel Hunza Baltit Inn, por la tarde, con el Ultar Sar (7.388 m) detrás.

Atractivos turísticos cercanos:

• Fuerte de Altit.
• Trekking al glaciar de Ultar y los canales aéreos de regadío.
• Visitar el cercano valle de Nagar y conocer los glaciares de Hopar o Bualtar, que crece a los pies del Diran Peak (7.266) y de Barpu, que crece a los pies del Spantik o Golden Peak (7.027).

Más información:

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• Web oficial del Fuerte Baltit (inglés).